EL QUE MENOS QUIERE, GANA.



Es una triste verdad innegable. Superémoslo, y evitemos cortarnos las vena con una cuchara.

Luego de una dramática ruptura, (como todas en mi vida). Ahí estaba sentado frente a frente a mi relacion lógica sin Corazón. Mi tercera relación sentimental que terminó sin anestesia y mucha de su lógica.

Como un par de amigos, ahí estábamos sentados uno frente al otro en el primer restaurante donde almorzamos juntos, hablamos de lo ocurrido, lo que no sabíamos del uno y del otro y nuestro futuro. A veces me sorprendo de lo “maduro” que puedo ser cuando en realidad ya no estoy enamorado. Yo soy otro. Y me senté en la fila en donde esa persona decidió sentarme desde hacia ya varios años.

Soy partidario acérrimo de ser amigo de mis ex. Por más amor que hubo o cagadas que existieran y viceversa. Conocieron parte de lo que tenia mi corazón y mi realidad en ese momento y merecen un lugar valioso en mi vida. Aunque debo confesarles que es miedoso como luego de terminar lucen mucho mejor que cuando estaban con uno. Bueno no siempre, algunas personas se maluquean feisimo, pero ese es otro tema.

Volvieron al almuerzo improvisado: Su tema de conversación era básicamente la ruptura que esta enfrentando, sus sueños y sus anhelos. El mío era escuchar, opinar y pensar si volveríamos a ser algo más que amigos con un pasado en común...Sobre todo teniendo en cuenta que seguimos teniendo los mismos gustos gastronómicos, nos tenemos aún admiración mutua, entendemos los mismos chistes entre líneas y tuvimos tantas historias bonitas que compartir que hasta al mas radical lo hace dudar.

Luego del almuerzo quedamos de hablar para tomarnos algo, a las 2 horas me llamó para cancelar, había decidido darle una oportunidad a su ex y queria hablar con él. Una vez más, compruebo que cuando uno quiere de verdad, a veces el tiempo solo apacigua los sentimientos que nos despiertan las personas que cambiaron significativamente nuestras vidas. Supongo que por eso evito enamorarme tanto y me propongo a diario a escribir más.

Ah y la idea de volver a estar juntos solo fué una idea. Bobadas que a veces se le pasan a uno cuando tiene hambre y si... supongo que ahora le quiero mucho menos que lo que le queria antes.

Nos leemos al ratoMatt

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